La propuesta de modificación que se ha presentado por parte de la organización colegial, es la que se detalla a continuación:
Teniendo en cuenta que está abierto a consulta y participación pública previa el Proyecto de Decreto por el que se regula la ordenación y el currículo de la Educación Primaria en la Comunidad Autónoma de Canarias, solicita que se tenga a bien, tener en cuenta, las siguientes aportaciones:
1. PROPUESTA DE MODIFICACIÓN
EN ANEXO IV – HORARIO
DONDE SE PROPONE:
En la tabla del horario de las sesiones de 45 min, donde se establece en el 6º curso de Primaria, 3 sesiones de 45 minutos de Educación Física:
DEBE PROPONERSE:
Que sean 4 también las sesiones de 45 minutos de Educación Física en el 6º curso de Primaria, tal y como se propone en la siguiente tabla:
JUSTIFICACIÓN.
Establecer solo 3 sesiones de 45 minutos de la materia de Educación Física en el 6º curso de primaria, disminuye los minutos semanales de actividad física del alumnado de este curso a tan solo 135 minutos, muy alejado de los 180 minutos semanales de Educación Física que venía desarrollando ese alumnado en cursos anteriores y por supuesto, más alejado aún de los más de 300 minutos semanales de actividad física que propone la Organización Mundial de la Salud (OMS) en niños y adolescentes de entre 5 y 17 años.
Un dato importante a tener en cuenta es que es justamente en la adolescencia cuando se produce un mayor porcentaje de abandono hacia la práctica de actividad física y deportiva y por tanto disminuye drásticamente la adherencia a la misma. Si además lo unimos a que en la etapa de Secundaria el alumnado tiene menos minutos semanales de la materia de Educación Física, seguiríamos propiciando la inactividad física, el sedentarismo y por tanto el sobrepeso en la adolescencia.
El 5 de julio de 2017 el Parlamento de Canarias aprobó por unanimidad la Proposición No de Ley 9L/PNL 0435 sobre la aplicación de Ley de Seguridad Alimentaria y Nutrición, en la que en el punto primero se insta a la Consejería de Educación y Universidades a “estudiar la implantación de la tercera hora de Educación Física por semana en Educación Obligatoria, Formación Profesional y Bachillerato”
Más Educación Física por:
1. Por su efecto en el resto de aprendizajes (Neurociencia).
3 minutos de ejercicio aeróbico mejoraron la memoria tanto a corto como a largo plazo (Winter et al., 2007).
Sibley y Etnier (2003) y Hillman, Erickson y Framer (2008) vieron una relación positiva entre la actividad física y el rendimiento escolar, incluidas las puntuaciones de las pruebas estandarizadas. Ratey (2008), Coe, Pivarnik, Womack, Reeves y Malina (2006), y Hillman et al. (2008) encontraron que cuanto mejor se desempeñaban los niños de primaria en las pruebas físicas, mejor obtenían sus calificaciones en las pruebas de rendimiento, independientemente del nivel socioeconómico. Esta investigación sugiere formas en las que podemos mejorar la vida y la capacidad de aprendizaje de nuestros estudiantes mucho más que un simple enfoque en el contenido académico.
Como sugiere Helen Neville (2012), se deben determinar las intervenciones que mejoran la plasticidad cerebral, y el ejercicio lo hace.
Actividad física y rendimiento académico:
Desde hace algunas décadas, se ha tratado de comprobar la existencia de relación entre la actividad física y los procesos cognitivos que se desencadenan en la región cerebral (Stone,1965). Esta relación es ya un hecho comprobado (Buscemi et al., 2014; Syväoja, Tammelin, Ahonen, Kankaanpää y Kantomaa, 2014).
Otros estudios han aportado evidencias de la existencia de un rendimiento académico menor en niños con sobrepeso u obesidad. Heshmat, Larijani, Pourabbasi y Pourabbasi (2014) constataron un promedio de calificaciones más bajo, así como menores puntuaciones en Matemáticas y Geometría, en los alumnos con sobrepeso. Como se podría esperar, el promedio de las calificaciones también baja en los niños con obesidad (Kantomaa et al., 2013). La actividad física también juega un papel clave en los niños con condición de sobrepeso, mejorando la función ejecutiva de los sujetos (O’Malley, 2011).
2. Por sus efectos sobre la salud:
Burnes (2010) en su Informe sobre Obesidad Infantil para la Casa Blanca: “Cuando los y las adolescentes sienten que tienen cualidades y son competentes para el ejercicio físico, eso les anima para realizar más ejercicios. De la misma manera, cuando se sienten apoyados en la práctica por la familia y sus amistades, practican muchos más deportes.
Estas normas sociales no escritas tienen poder suficiente para determinar las acciones de la gente (…)”. Al respecto, enfatiza que “(…) para provocar cambios en los hábitos de actividad física debemos provocar cambios en la estructura de la educación, y en la didáctica; en los espacios de ocio de las comunidades, y en las decisiones del gobierno al respecto de la actividad física (…)”
La Actividad física y el sobrepeso:
Los principales beneficios de la actividad física, son el incremento del gasto energético y la transformación de la composición corporal de los individuos. En base a ello, aparecerán cambios en la tasa de metabolismo basal de los sujetos y cambios en el efecto termogénico de los alimentos (Martínez, Moreno, Marques-Lopes y Martí, 2002). La actividad física de resistencia cardiorrespiratoria se ha alzado como el modo óptimo para reducir masa grasa, aunque no se debe olvidar que un adecuado trabajo de resistencia muscular ayudará, en gran medida, a lograr dicha reducción (Willis et al., 2012). El primero produce un gasto energético durante la actividad y también después de la misma, pudiéndose convertir en un efecto a largo plazo si se siguen unas pautas. El segundo tipo de trabajo ayudará a aumentar la cantidad de masa magra corporal y, a su vez, a aumentar la tasa metabólica basal, desencadenando un mayor gasto energético a largo plazo.
Actividad física y salud mental:
En cuanto a la salud mental, se ha demostrado que altos niveles de actividad física están asociados a una reducción de los síntomas de depresión en niños (Kremer et al., 2014) y que ayuda a reducir los niveles de ansiedad (Brunes, Augestad y Gudmundsdottir, 2013). Por otra parte, la actividad física tiene efectos positivos sobre la autoestima de los sujetos y, en última instancia, la calidad de vida de los mismos (Joseph, Royse, Benitez y Pekmezi, 2014).
3. Por compensación tras la pandemia SARS_Covid
4. Por las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud sobre la práctica de Actividad Física en estas edades:
Las directrices y recomendaciones de la OMS proporcionan información detallada en cuanto a los diferentes grupos de edad y los grupos de población específicos sobre el nivel de actividad física necesario para gozar de buena salud.
La OMS recomienda:
En las 24 horas de un día, los niños de 3 a 4 años de edad:
· Deberían realizar diferentes tipos de actividades físicas de diversa intensidad durante al menos 180 minutos, de los que al menos 60 minutos se dedicarán a actividades físicas moderadas a intensas repartidas a lo largo del día; cuantas más, mejor;
no deberían estar retenidos durante más de una hora cada vez (por ejemplo, en cochecitos/sillas de bebé) ni sentados durante períodos de tiempo prolongados;
no deberían pasar más de una hora en actitud sedentaria frente a una pantalla; cuanto menos, mejor;
deberían participar en la lectura y la narración de cuentos con un cuidador cuando estén en actitud sedentaria;
• Deberían tener de 10 a 13 horas de sueño reparador, que puede incluir una siesta, con horarios regulares para dormir y despertarse.
Los niños y adolescentes de 5 a 17 años
· Deberían dedicar al menos un promedio de 60 minutos al día a actividades físicas moderadas a intensas, principalmente aeróbicas, a lo largo de la semana;
· Deberían incorporar actividades aeróbicas intensas, así como aquellas que fortalecen los músculos y los huesos, al menos tres días a la semana;
· Deberían limitar el tiempo dedicado a actividades sedentarias, particularmente el tiempo de ocio que pasan frente a una pantalla.
PROPUESTA DE MODIFICACIÓN
EN ANEXO II – CURRÍCULO DEL ÁREA DE EDUCACIÓN FÍSICA
DONDE DICE:
Situaciones de aprendizaje, orientaciones metodológicas, estrategias y recursos didácticos
(Al final del último párrafo)
Todo esto se complementa con la posibilidad de experimentar acontecimientos deportivos, donde se vele por el respeto, la inclusión y la deportividad, tanto para adquirir saberes propios del área como los de otras áreas con las que se pudiera relacionar interdisciplinarmente, implicando al alumnado en la organización a través de la asunción de diferentes roles y responsabilidades.
SE SUGIERE:
Revisar la pertinencia de la referencia al modelo de educación deportiva, o bien se plantee como mera orientación, dado que se trata de un modelo que tiene su origen en el modelo deportivo anglosajón asociado a la competición y podría no responder al principio de inclusión del sistema educativo español.
Fernández-Río, J., Calderón, A., Ortiguera Alcalá, D., Pérez-Pueyo, A. y Aznar Ceba manos, M. (2016). Modelos pedagógicos en educación física: consideraciones teórico-prácticas para docentes. Revista Española de Educación Física y Deportes, 413, 55-75. Disponible en: https://www.reefd.es/index.php/reefd/article/view/425/414
Página 5. Las unidades didácticas realizadas bajo las características de este modelo se dividen, al menos, en cuatro fases: (1) Fase de práctica dirigida: en la que el docente dirige la clase, en tres o cuatro sesiones mediante la instrucción directa y la asignación de tareas; (2) Fase de práctica autónoma: en la que se realiza un trabajo autónomo del alumnado por equipos, asumiendo los roles asignados, que durará cinco o seis sesiones; (3) Fase de competición forma: en la que se lleva a cabo una aplicación de l1as competencias adquiridas en fase de práctica dirigida y de práctica autónoma; y (4) Fase de reconocimiento fina: en la que se reconocen y se premian las competencias adquiridas mediante entrega de diplomas con carácter festivo y realización de un evento audiovisual con un resumen de la unidad, entre otras actividades de aprendizaje. Existe otra variante de este planteamiento en la que se alternan las fases de práctica autónoma con pequeñas competiciones adaptadas, para poder incidir de forma más concreta en los contenidos de tipo más técnico como las habilidades atléticas, las gimnásticas, o las acuáticas.
Uno de los principales objetivos del COLEF Canarias es concienciar, argumentar, fomentar y ayudar a impulsar y proyectar una Educación Física de Calidad en la Comunidad Canaria, por ello no cesaremos en nuestro empeño de conseguir la mejor Educación Física para el alumnado y profesorado del archipiélago canario.
Suscríbete para estar al día de todas nuestras novedades